Nación y Municipio encaran el recambio de cañerías de la red de agua potable, que tienen una antigüedad superior a los 80 años. Se realizará con fondos aportados por el ENOHSA, otorgándose $ 26.281.646,70 para la primera etapa.
La Municipalidad y el Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (ENOHSA) firmaron un convenio para reemplazar cañerías distribuidoras de hierro fundido correspondientes a la red de agua potable. El acuerdo fue rubricado este lunes por el intendente Martín Oliva y el titular del Ente, Enrique Tomás Cresto.
Se trata de $26.281.646,70 que son destinados por el ENOHSA para la primera de las cinco etapas comprometidas, previendo que la obra se desarrolle en seis meses y que la inspección de obra esté a cargo de la Municipalidad. El gobierno local se encargó de elaborar el proyecto de obra, correspondiéndole también desarrollar el procedimiento de contratación para la ejecución de las tareas.
“Empezaremos desde el centro yendo hacia la periferia cambiando este sistema de cañería que tiene más de 80 años. Sumado a la red de la segunda etapa del Plan Maestro de Agua, se trata de una tercera etapa, para la cual hemos comprometido al ENOHSA para concretarlo. El proyecto pretende que el agua potable llegue a mucho más sectores de la ciudad”, expresó el Intendente.
Por su parte, Cresto ubicó a este convenio como parte de “lo dispuesto por el presidente Alberto Fernández y el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, para trabajar con las políticas a corto plazo, como la reactivación de obras con los municipios de todo el país, y las políticas a mediano y largo plazo, teniendo un diagnóstico de toda la Argentina”.
“Argentina Hace”
Este Plan nacional promueve la reactivación de economías locales, del sector de la construcción, la generación de mano de obra intensiva y la consolidación local y regional. Todo esto, mediante la realización de obras de infraestructura social básica de ejecución rápida en todo el país, en el marco de la obra pública.
Cabe señalar que las actuales cañerías que se ubican en el casco histórico de la ciudad, se rompen a diario debido a su desgaste ya que no soportan la presión que ofrece la red de distribución de agua potable, por lo que se requiere un recambio urgente de estas cañerías. “Recibimos con mucha alegría este aporte del Estado Nacional que servirá para mejorar sustancialmente el servicio y reducir las roturas de cañerías, asfalto, cordones, entre otros aspectos” destacó Martín Oliva.